La candidata del Partido Popular a la alcaldía de Madrid, Esperanza Aguirre, visitó ‘La Terraza de Gran Vía’ para explicar sus planes para la ciudad.
La presidenta del PP de Madrid explicó que el resto de partido plantean que están contra ella en las elecciones y que, en el caso de no conseguir la mayoría absoluta, será alcalde la minoría más votada. No obstante, explicó que, “si los perdedores se unen y tienen más apoyos, si se unen Podemos y los socialistas, pueden gobernar”.
Incidió en que se puede gobernar un ayuntamiento en minoría porque se trata de una entidad para prestar servicios y es normal que se llegue a acuerdos con los partidos para servir a los ciudadanos. En este sentido, Aguirre concretó que hay que acabar con el afán recaudatorio de la adaministración local y poner a los funcionarios al servicio de la población.
Explicó que no acometerá grandes obras pero sí estudiará, junto a los funcionarios, los proyectos para que cumplan las condiciones urbanísticas de legalidad, evitando la opacidad.
Se jactó de que ella, en su época de concejala de Medio Ambiente, implantó el gas natural comprimido en los autobuses de la EMT y eludió hablar de una posible privatización de la compañía. No obstante, sí abogó por aumentar el uso de microbuses en la red.
Por otra parte, aseguró que no le temblará la mano en tomar medidas restrictivas con el tráfico si hay un incremento de la contaminación grave, ya que hay que cumplir con la ordenanza. En ese caso, explicó, se fomentaría el uso del transporte público.
A nivel electoral, apostilló que ella es la misma en sus valores y que el Gobierno municipal es el del alcalde y sus concejales, de tal manera que, si gobierna, ella reducirá impuestos y apostará por la transparencia y por los mecanismos anticorrupción.