“La Cospe” es de primera.

María Dolores de Cospedal será la Secretaria General del PP porque así lo ha querido Mariano Rajoy, y ella misma, aspecto importante que no debemos olvidar en modo alguno. Sin embargo no es plato de segunda de mesa, por mucho que algunos se empeñen en recordarla que está ahí porque otros no han querido desde Arenas a Pío García Escudero, pasando por Ana Mato.
A la Cospe, le sobran méritos políticos y preparación profesional que a otros de los nombres barajados le podían venir grande. Es mujer valiente e independiente, de decisiones ràpidas pero sopesadas y que dejó a su paso por la Comunidad de Madrid como Consejera de Transportes una buena opinión generalizada. No significa esto que no cometiera errores y que ahora no tenga por delante el reto de administrar una victoria abrumadora en el Congreso del PP del fin de semana en Valencia. Más bien al contrario. Su Marianismo se me antoja casi comparable a su Aguirrismo y eso es conjugable con dificultad en éste momento, o quizá no, esa sea la razón y el motivo final que procure una integración necesaria, y cierta, que evite un cierre en falso del Congreso. Aún es pronto para valoraciones, acabo de conocer la noticia y seguramente precipitarse blanco sobre negro obligue a “mantenella” cara al futuro, pero no es mi caso, nunca me han dolido prendas en rectificar si fuera menester. Convencido que la apuesta de Rajoy es la correcta en la Secretaría General, y la aceptación de Cospedal la adecuada, el camino abierto para democratizar la vida interna del PP no puede cerrarse así. Las enmiendas presentadas serán muchas y variadas, desde primarias a “matrimonios” homosexuales y ahí es donde deberá retratarse el futuro ideológico del “nuevo PP” que se estrenará la próxima semana.
Tampoco es cierto que se desnude el santo de la conquista de la futura Presidencia de Castilla la Mancha para vestir el del Partido, primero porque Toledo cae a un paso de Madrid y segundo porque aún suponiendo que dejará la máxima responsabilidad del partido popular en esa Comunidad, nada la impediría ser candidata en las próximas elecciones autonómicas. Más bien al contrario, su grado de conocimiento y popularidad crecerá de manera cuantitativa y seguro que también cualitativa. Son primeras apreciaciones a “vuela pluma” pero el baile no ha hecho más que comenzar. De momento Cospedal tendrá con Rajoy el respaldo mayoritario del partido, como lo administren dependerá de su grado de mano diestra, sin olvidar que en su entorno político y mediático aparecerán muchas siniestras.

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *